Trabajadores simulando, frente a la Sede de las Naciones Unidas en Bruselas, estar atrapados bajo un carro gigante de un supermercado. De esta forma protestan para que los dueños de los supermercados compren alimentos y objetos que no estén fabricados por esclavos de países tercermundistas.
lunes, 19 de octubre de 2009
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